La sanidad pública es universal y gratuita. Bajo esta premisa pensamos que la Seguridad Social cubrirá cualquier percance que suframos en nuestra vida. Nada más lejos de la realidad. Una cosa es que te atiendan en el Hospital y otra bien diferente que los gastos sanitarios estén cubiertos. Esto es lo que ocurre con los accidentes de tráfico que no están cubiertos por la Seguridad Social y sí por el seguro de tu coche, pero sólo si tienes contratada la cobertura de accidentes del conductor.
Cuando hay un accidente en carretera la atención sanitaria correrá a cargo de la aseguradora. Esto quiere decir que es el seguro de coche quien tiene que pagar cualquier intervención a la que te sometas. Para que lo entiendas mejor, si tienes un percance de tráfico y acudes al hospital público, te atenderán y te precisarán todos los cuidados que necesites, pero no se harán cargo de los gastos de estos tratamientos. Después enviarán la factura a tu seguro para que se haga cargo de la cuantía de la intervención.
Por eso mismo, la mayoría de seguros de coche cuentan con centros sanitarios concertados, especialmente para los procesos de rehabilitación. En muchos casos, al tratarse de grandes empresas que también trabajan con seguros de salud y de accidente, aprovechan las sinergias entre ambos ramos.
¿Estás siempre cubierto por tu seguro de coche?
El hecho de que el seguro se haga cargo de los gastos médicos en caso de accidente de circulación no es sinónimo de que estés cubierto siempre. La clave está en las coberturas que tengas contratadas. Y es que el seguro obligatorio de coche sólo cubre lo que se conoce como responsabilidad civil, es decir, los daños que tú ocasiones con tu vehículo a una tercera parte.
Para que lo tengas más claro, con un seguro obligatorio si tienes un accidente en el que tú eres culpable, la aseguradora se encargará de atender al otro conductor, pero no de ti ni de tu vehículo. La traducción es que si eres tú el culpable o tienes un accidente sin otros vehículos involucrados, estarás sin protección salvo que hayas incluido la cobertura de accidentes del conductor en tu póliza.
En este caso, podrás acudir ala Seguridad Social para que te atiendan, pero después te enviará la factura por los gastos médicos, ya que la aseguradora no se hará cargo de ellos.
Por fortuna, los seguros han evolucionado mucho a lo largo de los años y hoy en día la mayoría de pólizas básicas incluyen los accidentes al conductor y la defensa jurídica.
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